Cómo ganar dinero con los temores del calentamiento global
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Con la economía tan difícil como está, Al Gore no debería ser la única persona que gane dinero con los temores del calentamiento global. En un esfuerzo por difundir la riqueza, ofrezco una serie de consejos para que los lectores se hagan igualmente ricos a partir de supuestas crisis de calentamiento global.
En primer lugar, identificar a los proveedores prominentes de la peste y la peste del calentamiento global. Cuanto más grande sea el jamón de los medios, mejor. Para una lista inicial, sugiero a Al Gore, James Hansen, Michael Mann, Gavin Schmidt y Joe Romm.
En segundo lugar, siempre que los proveedores de la fatalidad hagan predicciones ridículas sobre el calentamiento global, pídales que pongan su dinero donde están sus bocas. Después de todo, si Al Gore puede instar fervientemente al gobierno a que nos obligue a gastar el dinero que tanto nos ha costado ganar cumpliendo con sus predicciones sobre el calentamiento global, sin duda debería estar dispuesto a arriesgar sus propios millones respaldando sus reclamos sobre el calentamiento global.
A veces puedes tener suerte y descubrir a un alarmista engañado que se ha adelantado al golpe y ha ofrecido tal apuesta por su propia voluntad. Por ejemplo, acabo de encontrarme con esta entrada en el blog de Joe Romm que ofrece apostar incluso dinero a que el Océano Ártico estará libre de hielo para el año 2020. ¡Habla de quitarle un caramelo a un bebé! Contactaré a Joe inmediatamente. Insto a todos los lectores de esta columna a que hagan lo mismo.
Una palabra de precaución es apropiada aquí. Sería prudente insistir en que ambas partes entreguen su dinero por adelantado a un tercer árbitro. Tal vez estoy siendo demasiado suspicaz, pero no confiaría en que los alarmistas no desperdicien sus apuestas. Como diría Ronald Reagan, confía pero verifica.
También, siéntase libre de comprar en el foro. Si estoy en Las Vegas y quiero apostar el domingo en el juego Falcons-Lions, ¿por qué apostaría mi dinero por los Falcons en un casino donde los Falcons son sólo tres puntos menos que los Falcons cuando puedo apostar los Falcons en otro casino que está dando cuatro puntos? Lo mismo se aplica a las apuestas sobre el calentamiento global. Joe Romm está apostando por un Ártico libre de hielo para 2020. Sin embargo, el profesor Wieslaw Maslowski de la Escuela Naval de Postgrado predijo un Ártico libre de hielo para 2013. Apostar con Romm es muy parecido al dinero gratis, pero ¿por qué no afeitarte siete años más si puedes conseguirlos?
Un Ártico libre de hielo es sólo una de las innumerables oportunidades de hacer dinero disponibles. A los alarmistas les encanta llenar los medios de comunicación con predicciones exageradas sobre huracanes, inundaciones, sequías, aumentos rápidos de temperatura, etc. Con tantos temas y alarmistas para elegir, un escéptico agudo y motivado sobre el calentamiento global puede estar pronto encendiendo puros con billetes de $100 mientras el resto de la nación continúa ahogándose en nuestra Gran Recesión en curso.
No te sientas culpable por tus nuevas riquezas. Siempre puede donarlos a obras de caridad o enviarlos a los manifestantes de Occupy Wall Street si adquiere más billetes de 100 dólares que puros para encenderlos.
Por supuesto, todo esto depende de que los alarmistas pongan realmente su dinero donde están sus bocas. Usted puede encontrar alguna resistencia al principio, pero no subestime el poder de la presión pública. Cuando un alarmista hace una predicción ridícula en un artículo de periódico pero se niega a respaldar su predicción con dinero en efectivo, envíe una carta al editor señalando la falta de fe del alarmista con respecto a su propia predicción. Cuando un alarmista está en un programa de radio haciendo un ridículo reclamo sobre el calentamiento global, llame y proponga públicamente una apuesta sobre la predicción.
No puedo dejar de enfatizar la importancia de seleccionar y nombrar un árbitro neutral y datos objetivos preaprobados. Por ejemplo, siempre y cuando James Hansen tenga libertad para manipular los conjuntos de datos de temperatura de la estación de superficie del Instituto Goddard, las capas de hielo pueden reclamar el puerto de Nueva York durante la próxima década, pero Hansen aún así podría afirmar que es "la década más caliente de la historia registrada". Insistir en datos objetivos como los datos de los satélites de la NASA sobre las temperaturas globales, el aumento del nivel del mar, etc. No hacerlo es tan ingenuo y tonto como Clark W. Griswold (Chevy Chase) entrando en un casino de Las Vegas y enfrentándose a la Casa en un juego de "Estoy pensando en un número entre el uno y el diez".
Finalmente, siéntase libre de ser creativo y piense fuera de la caja acerca de agregar más personas a su lista de posibles víctimas de apuestas, incluso si esto significa desviarse de la lista de los medios de comunicación. Por ejemplo, su vecino estridente pero no informado o tal vez el profesor de ciencias de la escuela intermedia de su hijo podría hacer algunas elecciones fáciles. De cualquier manera, hay una gran cantidad de fruta que está a la espera de ser arrancada.
James M. Taylor es investigador principal de política ambiental en el Heartland Institute y editor gerente de Environment & Climate News.
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Imagen de AFP/Getty Images a través de @daylife
Con la economía tan difícil como está, Al Gore no debería ser la única persona que gane dinero con los temores del calentamiento global. En un esfuerzo por difundir la riqueza, ofrezco una serie de consejos para que los lectores se hagan igualmente ricos a partir de supuestas crisis de calentamiento global.
En primer lugar, identificar a los proveedores prominentes de la peste y la peste del calentamiento global. Cuanto más grande sea el jamón de los medios, mejor. Para una lista inicial, sugiero a Al Gore, James Hansen, Michael Mann, Gavin Schmidt y Joe Romm.
En segundo lugar, siempre que los proveedores de la fatalidad hagan predicciones ridículas sobre el calentamiento global, pídales que pongan su dinero donde están sus bocas. Después de todo, si Al Gore puede instar fervientemente al gobierno a que nos obligue a gastar el dinero que tanto nos ha costado ganar cumpliendo con sus predicciones sobre el calentamiento global, sin duda debería estar dispuesto a arriesgar sus propios millones respaldando sus reclamos sobre el calentamiento global.
A veces puedes tener suerte y descubrir a un alarmista engañado que se ha adelantado al golpe y ha ofrecido tal apuesta por su propia voluntad. Por ejemplo, acabo de encontrarme con esta entrada en el blog de Joe Romm que ofrece apostar incluso dinero a que el Océano Ártico estará libre de hielo para el año 2020. ¡Habla de quitarle un caramelo a un bebé! Contactaré a Joe inmediatamente. Insto a todos los lectores de esta columna a que hagan lo mismo.
Una
palabra de precaución es apropiada aquí. Sería prudente insistir en que ambas partes entreguen su dinero por adelantado a un tercer árbitro. Tal vez estoy siendo demasiado suspicaz, pero no confiaría en que los alarmistas no desperdicien sus apuestas. Como diría Ronald Reagan, confía pero verifica.
También, siéntase libre de comprar en el foro. Si estoy en Las Vegas y quiero apostar el domingo en el juego Falcons-Lions, ¿por qué apostaría mi dinero por los Falcons en un casino donde los Falcons son sólo tres puntos menos que los Falcons cuando puedo apostar los Falcons en otro casino que está dando cuatro puntos? Lo mismo se aplica a las apuestas sobre el calentamiento global. Joe Romm está apostando por un Ártico libre de hielo para 2020. Sin embargo, el profesor Wieslaw Maslowski de la Escuela Naval de Postgrado predijo un Ártico libre de hielo para 2013. Apostar con Romm es muy parecido al dinero gratis, pero ¿por qué no afeitarte siete años más si puedes conseguirlos?
Un Ártico libre de hielo es sólo una de las innumerables oportunidades de hacer dinero disponibles. A los alarmistas les encanta llenar los medios de comunicación con predicciones exageradas sobre huracanes, inundaciones, sequías, aumentos rápidos de temperatura, etc. Con tantos temas y alarmistas para elegir, un escéptico agudo y motivado sobre el calentamiento global puede estar pronto encendiendo puros con billetes de $100 mientras el resto de la nación continúa ahogándose en nuestra Gran Recesión en curso.
No te sientas culpable por tus nuevas riquezas. Siempre puede donarlos a obras de caridad o enviarlos a los manifestantes de Occupy Wall Street si adquiere más billetes de 100 dólares que puros para encenderlos.
Por supuesto, todo esto depende de que los alarmistas pongan realmente su dinero donde están sus bocas. Usted puede encontrar alguna resistencia al principio, pero no subestime el poder de la presión pública. Cuando un alarmista hace una predicción ridícula en un artículo de periódico pero se niega a respaldar su predicción con dinero en efectivo, envíe una carta al editor señalando la falta de fe del alarmista con respecto a su propia predicción.
Cuando un alarmista está en un programa de radio haciendo un ridículo reclamo sobre el calentamiento global, llame y proponga públicamente una apuesta sobre la predicción.
No puedo dejar de enfatizar la importancia de seleccionar y nombrar un árbitro neutral y datos objetivos preaprobados. Por ejemplo, siempre y cuando James Hansen tenga libertad para manipular los conjuntos de datos de temperatura de la estación de superficie del Instituto Goddard, las capas de hielo pueden reclamar el puerto de Nueva York durante la próxima década, pero Hansen aún así podría afirmar que es "la década más caliente de la historia registrada". Insistir en datos objetivos como los datos de los satélites de la NASA sobre las temperaturas globales, el aumento del nivel del mar, etc. No hacerlo es tan ingenuo y tonto como Clark W. Griswold (Chevy Chase) entrando en un casino de Las Vegas y enfrentándose a la Casa en un juego de "Estoy pensando en un número entre el uno y el diez".
Finalmente, siéntase libre de ser creativo y piense fuera de la caja acerca de agregar más personas a su lista de posibles víctimas de apuestas, incluso si esto significa desviarse de la lista de los medios de comunicación. Por ejemplo, su vecino estridente pero no informado o tal vez el profesor de ciencias de la escuela intermedia de su hijo podría hacer algunas elecciones fáciles. De cualquier manera, hay una gran cantidad de fruta que está a la espera de ser arrancada.
James M. Taylor es investigador principal de política ambiental en el Heartland Institute y editor gerente de Environment & Climate News.
